NUEVA YORK - En un camerino de béisbol, la localización de la propiedad equivale a respeto. Los mejores jugadores y los más importantes reciben los mejores puestos en el cuarto. El viejo casillero de Derek Jeter
estaba cerca del pasillo que lleva a la cafeteria de los jugadores y las duchas.
Ahora ese es el puesto que ocupa CC Sabathia's en el camerino de los Yankees de Nueva York. La localización lo es todo, y si hubiese un capitán 'de facto' en este equipo de los Yankees, ese sería Carsten Charles Sabathia Jr.
"Yo siempre he visto a CC, en un sentido, como el pegamento que une este equipo", dijo el manager de los Yankees Joe Girardi. "Él siempre ha tenido la habilidad de unir a un camerino. Y no solo hablo de los lanzadores. Hablo de unir a todos los jugadores".
Los lanzadores no suelen ser los líderes de sus equipos. Ellos suelen hacerse cargo del cuerpo de abridores o del bullpen, pero no del equipo completo. Sin embargo, con este equipo de los Yankees lleno de jugadores jóvenes en ascenso, Sabathia es el hombre.
"Él tiene esa personalidad", dijo Girardi. "Es un hombre que siempre une a los jugadores y que hace cosas juntas como equipo. Creo que está en su mayor tranquilidad cuando está a punto de lanzar un gran partido. Es el mismo siempre, día tras día".
El miércoles, Sabathia estará en el montículo cuando los Yankees se midan a los Medias Rojas de Boston. Es un rol que él atesora. Sabathia tiene marca de 6-2 con efectividad de 4.12 y está en ascenso. Ha ganado cuatro aperturas consecutivas, permitiendo apenas cuatro carreras limpias en 24 1/3 entradas en ese periodo. Y ha ido cobrando más importancia en el terreno ante el desvanecimiento de Masahiro Tanaka.
La temporada de Sabathia se puede cortar en tres pedazos. En sus primeras tres aperturas, su efectividad fue de 1.47. En sus siguientes cuatro, fue de 9.58. Y en sus últimas cuatro victorias, la efectividad de Sabathia ha sido de 1.48.
"Solo tengo que lanzar pegado", dijo Sabathia. "Solo tengo que tirar la pelota adentro. Pienso que eso es más grande para mí, controlar la parte interior del plato".
Sabathia, con 37 años en julio, atesora los choques divisionales, ya que suele alimentarse de los grandes eventos. Despues de todo, fue Sabathia quien llevó a los Yankees a su más reciente campeonato en 2009.
"Es muy divertido", dijo Sabathia. "Para mí, estos juegos [ante los Medias Rojas] son tan grandes como los choques ante Baltimore y Toronto. Los juegos en la división son realmente grandes; especialmente ante esos tres equipos porque esos equipos son los que estamos persiguiendo o los que nos persiguen a nosotros".
En 2009, Sabathia sabía qué esperar con los Yankees. Con Jeter, Alex Rodríguez y otros, eran seguros contendientes a la Serie Mundial. En ese entonces él era un lanzallamas, que alcanzaba las altas 90 mph. Sin embargo, ya era un lanzador astuto, que en ocasiones quedaba oscurecido por su velocidad.
"Pienso que la gente tiende a olvidar lo bueno que ya era mi cambio en ese entonces", dijo Sabathia. "Pienso que definitivamente tuve un poco de eso [ser un lanzador que supera con su astucia a los rivlaes] en mí. Creo que eso ha hecho un poco más fácil la transición".
El cambio sigue siendo bastante bueno. En su más reciente apertura, los Azulejos se fueron de 7-0 ante ese lanzamiento en particular y se poncharon tres veces ante cambios, de acuerdo con ESPN Datos.
Con la inefectividad de Tanaka, Sabathia se ha convertido en alguien más importante en el montículo. Pero quien es sobresale más para Girardi y el equipo. Sabathia dijo que solo intenta ser él mismo. Al hacer eso, se ha convertido en el pegamento de los Yankees.
Fuente: ESPN